Es hora de actuar contra el acoso callejero.
Hay muchas formas de combatirlo. Desde ignorarlo -si no te sientes segura-, hasta reirte y mofarte del acosador en caso de encontrarse en un lugar seguro. No hay una respuesta buena o mala. Lo que está claro es que una pequeña acción es un gran paso para nuestra lucha.
Empodérate, actúa y contribuye a unas calles libres de acoso.
No tienes mi permiso. La firme respuesta contra el acoso callejero.
La Mancomunidad La Vega renueva el movimiento. No tienes mi permiso con el fin de conseguir una legislación que penalice el acoso callejero en todas sus formas.
¿Echar un piropo también? Si. Hemos dicho en todas sus formas.Los piropos son una forma -supuestamente sutil- de violencia de género.
Es hora de hacer ruido. Firma la petición en la plataforma change.org. Se acabó sostener la norma de que aquí no pasa nada.
Cada firma es clave para convertir las calles en espacios seguros donde se garanticen nuestros derechos, los de las mujeres.
Tenemos que plantar cara ante un problema social internacional tan grave: la opresión del hombre hacia la mujer en los espacios públicos de todo el mundo.
El movimiento evoluciona, atiende desde el feminismo se compromete.No solo busccamos sancionar: Prevenimos, informamos y concienciamos. Reivindicamos.
La desigualdad de género es el aliento de las fuerzas de poder. Y nosotras, mujeres y víctimas, somos el género que este sistema intenta debilitar.
Hay realidades que son incuestionables. Las calles están llenas de machismo, que desgraciadamente, sigue imperando a sus anchas.
¿Te queda claro?. No me mires, no me hables, no me toques, no me silbes, no te masturbes, no me violes. No me mates. No tienes mi permiso.
Campaña realizada con el apoyo d los fondos del Pacto de Estado contra la Violencia de Género del Ministerio de Igualdad